Antología

ANTOLOGÍA 50 MUJERES A 50 AÑOS DE…

ALICIA VALDEBENITO

SOLO EN SUEÑOS

Soñé que estábamos juntos
que me venias a buscar,
por la orilla de un río
nos íbamos a caminar.

Tomados de la mano
jugando a ser niños
corríamos y corríamos,
haciéndonos cariño.

Te he soñado tanto.
Yo no sé, si es pecado
solo en sueños te veo
y eres mi tan amado. 

Eres lucero fulgurante,
eres el sol que me quema
en el verano floreciente,
y olor perfumado en la arena. 

Color de violeta tus ojos
de miel tu cabello ondulado
de rosas perfumadas
eres mi amante soñado. 

Solo en sueños me buscas
jamás en un día claro
seguirás siendo un sueño
y nunca te habré encontrado.




SI VUELVES 

Cuando tú vuelvas
correré a tu encuentro
secaré tu cara con mi pañuelo
esas gotas de rocío por el esfuerzo
son como lluvia en el desierto.

Cuando tu vuelvas
serás mi alegría
mi corazón saltará como un niño travieso.

Te veo de lejos, bajar corriendo
por entre las camelias y los filodrendos.

Correré a abrir la puerta.
Como si fuera un lucero
que alumbra mi noche
en el silencio. 

Cuando tú vuelvas,
no sentiré frío
me arroparas con tus brazos
me cobijaré muy dentro
sí, muy dentro de tu corazón,
y de ahí no volveré a salir. 

Cuando tu vuelvas…

LUNA


Tú entras sin avisar
por el cristal de mi ventana
besas sin rozar, mi cara dormida
bajo las cobijas de mi cama.

Alumbras sin avisar con
con tu luz tenue 
dejan tus suaves rayos
en mi cabello, como
cada día espero tus caricias,
en el recuadro del visillo,
que traspase tu cariño
y llegue el dulce amanecer. 

Eres todo lo que espero.
Después de tanto tiempo 
tu dulzura, tu calor, 
el perfume de la flor de mañana
el candor de tu iluminada pasión
tu beso suave que alegra
mi adormecido corazón.









SI VUELVES 

Cuando tú vuelvas
correré a tu encuentro
secaré tu cara con mi pañuelo
esas gotas de rocío por el esfuerzo
son como lluvia en el desierto.

Cuando tu vuelvas
serás mi alegría
mi corazón saltará como un niño travieso.

Te veo de lejos, bajar corriendo
por entre las camelias y los filodrendos.

Correré a abrir la puerta.
Como si fuera un lucero
que alumbra mi noche
en el silencio. 

Cuando tú vuelvas,
no sentiré frío
me arroparas con tus brazos
me cobijaré muy dentro
sí, muy dentro de tu corazón,
y de ahí no volveré a salir. 

Cuando tu vuelvas…






ASÍ, TE QUIERO

Porque, quiero dormir en tus brazos
y estar así eternamente
porque quiero que la noche no termine
y estar sola contigo
no quiero que te vayas,
no quiero que vuelvas a tu paz
si te llevas la mía.

Me dejas rota la esperanza. 
no quiero que vuelvas a tu estrella
si la mía se queda sin brillo
y no alumbra.

Quédate, hasta siempre,
hasta el infinito
quédate aquí cerquita y
muy dentro de mi pecho
en medio de mi consciente.

Quédate, amor en el viento
quédate en la luz del amanecer
quédate no te apartes nunca,
ya que eres todo lo que tengo,
dentro de mi ser.

Eres el aire, que mece los jazmines
Eres, la luz que alumbra a la luna
no te apagues
no te vayas nunca.

Quédate, amor junto a mí
en este pasivo sueño
que es donde te tengo
donde veo tu cara, y toco tus manos
donde tus ojos me guiñan
y tu boca lanza un suspiro

Quédate, amor, sin tiempo
porque quiero dormir en tus brazos
y estar así eternamente.








TRISTEZA

En el atardecer de mi vida
me doy cuenta de lo que soy.
Sé que han pasado tantos días
y todos contigo a mi lado,
con cosas muy lindas
hemos estado
con tristezas pocas.
Con el correr del tiempo
hemos cambiado,
tus cabellos rubios
a blanco han pasado
tu figura esbelta
en lenta, ha terminado
pero, tus ojos bellos
se han acentuado
ese azul profundo
en dos gotas han quedado.
Tan azules como el cielo claro
sé, que me has amado
como yo,
aunque nos hemos regañado
la vida nos dio tanto
y tan poco a la vez.
Pero hemos sido tan felices
en este paraíso de locos
por el que pasamos.


DE SU POEMARIO  (inédito)
POEMAS DE TODOS LOS TIENMPOS

Próximo a publicar
Autora
Alicia del Rosario Valdebenito Sorondo
Nace en ciudad de los ángeles 8° región (chile) en la histórica vivienda “Las Canteras”
Autodidacta, poetisa y escritora, su amor por el prójimo y respeto por todo ser viviente definen sus letras.
Reside en Peñaflor, hace 43 años.

Prólogo

Un libro escrito con el alma es valioso porque es un sortilegio de instantes.
La poesía fluye en su alma a caudales desde un encuentro de dolor hasta tomar la percepción fantástica que es vivir.
En su trabajo poético que creo, no se suelta el más mínimo detalle que es la vida misma, una acuarela de sentimientos, tanto del amor o la partida de su madre, que le dio todo ese cariño, porque su padre falleció antes, y señala con ternura “eras chiquitita”
Sin lugar a duda la escritora sabe desentrañar ese instante de canto, en su poema: “Mujeres esto somos”
Finalizando con tres versos claves: somos la fuerza mayor/ somos todas las mujeres/ un gran poema de amor.
Nace la poeta en este libro y lleva mucha fuerza, desde esa contemplación al océano, al ser humano que llora desvalido en la calle, hasta recordar a su hermano.
Estamos ante un gran trabajo, que la editora Mónica Montero, supo clasificar para compaginar y darle un gran matiz creativo. Regreso a su poema “Madre” cuando la define: la vi tan pequeña/ tan valiente/ pensé que era una diosa en espera.
Sin duda que su incansable voluntariado en la Cruz Roja le dio toda esa visión de amor a sus semejantes y ya la poeta nacía, desde su infancia o de ver un álamo solitario, la vida que se apaga como el adiós de su hermano.
El amor de mujer, el sentimiento, el reproche, surca en sus mágicas letras, donde en el hogar y la visita de su hijo, sus nietos o su esposo que le pasó en limpio sus trabajos.
Me detengo en su poema titulado, “EL atardecer de don Juan”, donde ella transmite el dolor de ese hombre en la calle.
Alto vuelo de humanidad, por eso la buena poesía nace de esa bendición en el hogar, por eso, ese poema descrito a esa persona de la calle acentúa el deber de los seres que escriben y Alicia dice: ya viaja al lugar que tanto quería/ una mañana de junio/ blanca de escarcha su barba.
Le damos la bienvenida a la escritora Alicia Valdebenito, porque viene con bellas imágenes de la vida y que por sobre todo la humildad no cesa, por eso le canta a la bandera nuestra, su amor a su familia escuchar hasta ese sonido de disparos en la noche, es igual a la vigilia de los ruidos y el silencio, además lee mucho desde las novelas de Tolkien hasta las Odas Elementales de Pablo Neruda.
Ama el folclore, se ha presentado en colegios y es conocida en el ambiente cultural de Peñaflor.
Gabriel Miranda Riquelme
GAROMI
San Bernardo 2023

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